El Consistorio tiene actualmente las cuentas prorrogadas de 2012 al no llegar a acuerdos entre los grupos políticos
Y. G. T.
Segundo intento de aprobación de los presupuestos municipales de 2013. El equipo de gobierno del PP -en minoría- llevará el próximo jueves a Pleno por segunda vez este año, las cuentas tras haber mantenido varios encuentros para llegar a un consenso con las otras fuerzas políticas de la Corporación.
El concejal de Hacienda, Pedro Corbacho, informó que el capítulo de ingresos es de 6.490.936,16 euros y el de gastos de 6.249.738,17 euros, lo que significa apenas unos 1.300 euros de superávit. El capítulo 2 de gastos corrientes se ha reducido en un 18,6% con respecto al borrador que se presentó en el mes de julio y que fue rechazado por el restos de grupos políticos. La cuantía total es de 1.146.142,08 euros.
En cuanto al gasto de personal, es de 2,9 millones totales y se incrementa en un 1,8% al incluirse el personal de la ayuda a domicilio.
El edil destacó que son unos presupuestos muy ajustados y austeros que han tratado de incluir más inversión en las políticas sociales, si bien añadió que existe mucha limitación porque mantienen dos planes de ajuste de pago a proveedores, así como siete u otro planes de pago que suponen al mes unos 44.946,83 euros, lo que supone 540.000 euros anuales. Las principales deudas son con la Seguridad Social a la que se abona un cantidad de 142.000 euros anuales y a Hadienda, a la que se le aportan otros 132.000 euros.
A esto se le suman otras débitos como la del Consorcio de Transportes, a la que también se le aportan algo más de 15.000 euros anuales.
"Estamos tratando de salvar el funcionamiento del Ayuntamiento, hemos reducido la deuda con Hacienda y en agosto de 2015 estará totalmente liquidada. Se debía casi un millón cuando entramos en el Ayuntamiento, al igual que a la Seguridad Social", concluyó.
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