"Tempura de flores de calabacín rellenas de queso de oveja, tomate cherry y calabacín", por Gonzalo Polo

Ingredientes:

4 flores de calabacín del huerto

1/2 calabacín blanco, también del huerto

1/2 cebolla del huerto

16 tomates cherry,por supuesto que del huerto.( Éstos se supone que iban a ser corazón de buey, pero las matas que me regalaron resultaron ser tomateras cherry. Gracias por el intento, Diego Palas)

1 tomate de pera, o mejor dicho de perita, del huerto. (También de una mata donada por Diego Palas)

1 diente de ajo del Supermercado de Araceli, en el barrio alto.

1 tapa de queso de oveja, cedida por El Maleta, del Bar Mena

Sal gruesa y aceite de oliva virgen, También del Supermercado de Araceli
Para la tempura:

1 huevo de las gallinas del huerto

Harina de rebozar y 1/2 lata de cerveza barata, también del Supermercado de Araceli.

Elaboración:

Se rehoga el ajo, la cebolla y el calabacín con un chorrito de aceite de oliva virgen y un pizca de sal gorda en el wok, y se reserva.

Se abren con cuidado las flores de calabacín y se quitan los pistilos, para rellenarlas a continuación con un tomate cherry, el queso de oveja rallado y un poco del sofrito de calabacín. Se cierran las flores, se rebozan en la masa de tempura y se fríen con aceite de oliva virgen muy caliente.

Para emplatarlo, se hace una cama con el calabacín rehogado y se decora con el tomate de pera y los de cherry restantes y unas flores de tomillo de Guadiaro, regalo de Carolina de la Casa Verde de Agadén, agregando un poco de sal y un generoso chorro de aceite de oliva virgen. Se colocan las flores previamente escurridas sobre la cama de calabacín y se consume de inmediato.

Esto no tiene precio.

De segundo plato: un par de black-bass del pantano de Castellar, donados por Luis Heredia, gracias Luis, rebozados con el resto de la tempura y fritos en aceite de oliva virgen.

Para beber un vaso de agua de Arcgisa, lástima, no tenía otra cosa, pues anoche me bebí la otra mitad de la cerveza.

Y de postre dos cortados de café mezcla con leche de vaca de Galicia, también del Supermercado de Araceli, y un cigarrillo de tabaco de liar, desgraciadamente sin mezclar, del estanco de Gustavo.

Y otro día que he comido. Buen provecho.