Ya está listo el solado de uno de los tramos de la calle Real de San Pablo de Buceite.
La importante transformación que supone la reforma de la calle cada vez es más patente. Y es adornada por los plátanos que forman su copa, insistentes, después del calvario de la sierra en su cabeza y de la obra en sus pies.
El tramo donde se sitúa la sucursal de Cajasol ya está prácticamente acabado a falta de pocos detalles de construcción, los arriates, una estatua en bronce de la lámpara símbolo del pueblo y mobiliario urbano. Aunque todavía se encuentra vallada y está permitido el paso por zonas concretas.
Hace años a esta calle se le llamaba también "El paseo", porque los vecinos la utilizaban para pasear en días festivos, con la familia, hijos, etc... Era el centro social del pueblo. Con los años esta costumbre prácticamente desapareció, pero quizás pueda cambiar, porque con la reforma la calle Real cada vez invita más a pasear.
No hay comentarios:
Publicar un comentario