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28-A: EL PAÍS QUE QUEREMOS
Hay dos fuerzas que mueven el mundo. Una es la de la gravedad; la otra, la de las ideas. La primera permanece invariable, o al menos imperceptible para el común de los humanos, y se encarga de poner orden en el Universo. Las ideas, sin embargo, están sujetas a examen y evolución continua.
Hay dos fuerzas que mueven el mundo. Una es la de la gravedad; la otra, la de las ideas. La primera permanece invariable, o al menos imperceptible para el común de los humanos, y se encarga de poner orden en el Universo. Las ideas, sin embargo, están sujetas a examen y evolución continua.
Y es que la manera de interpretar las distintas corrientes del pensamiento político poco tiene que ver hoy con la de hace unos años: Una sociedad cambiante, nuevos retos, diferentes formas de entender la vida, hacen necesario su actualización periódicamente.
Sin embargo, hay una ideología que mantiene la misma doctrina desde siempre: Racista, homófoba, intolerante, machista, identitaria y revisionista de nuestra historia más reciente. Presumíamos de no tener en España extrema derecha, pero resulta que sí, que estaba agazapada y aparece ahora, sin pudor ni vergüenza, usando un lenguaje y unas actitudes que recuerdan los tiempos del tardo franquismo.
No crean que me refiero a VOX. O sólo a VOX. El partido liderado por Abascal es la punta de iceberg de una derecha extrema instalada en lujosos despachos, en consejos de administración, en la planta noble de Génova 13, en la Iglesia Católica, y también en sectores de la sociedad desencantados, o frustrados, con el modelo democrático surgido de la Transición.
Y es que durante los siete años de gobierno de Rajoy cada día nos sorprendía una noticia de malversación, blanqueo, enriquecimiento ilícito, recortes y precariedad. Malas prácticas que llevaron a la Justicia a acusar al Partido Popular como responsable a título lucrativo en tramas de corrupción.
Por el contrario, en los diez meses de gobierno socialista, Pedro Sánchez ha logrado revertir esa tendencia con medidas ejemplares como la subida del salario mínimo interprofesional, la revalorización de las pensiones con el IPC, la suspensión del “impuesto al Sol”, la igualdad de trato y oportunidades entre hombres y mujeres, la eliminación del copago farmacéutico para familias de rentas bajas, mejoras en becas y reducción de tasas universitarias, y las prestaciones de desempleo para mayores de 52 años. En definitiva, recuperación de la dignidad nacional y de las libertades y derechos de los ciudadanos.
Por eso, las elecciones del día 28 son existenciales. Trascendentes. Ese día nos jugamos el país que queremos y, sinceramente, creo que el único partido con la consistencia ideológica necesaria para lograrlo, para sumar más votos que las tres derechas, es el PSOE.
Es la hora de elegir el futuro que queremos.
16 comentarios:
Mata elegante y con respeto para los demás.
Encantada de leerte
No se engañe señor Mata, los extremos también han estado presentes siempre en la izquierda y son tan nocivos o más como los de la derecha. A las pruebas me remito con la corrupción, el caciquismo y el tráfico de influencias que ha existido en su partido años atrás como usted sabe. Desgraciadamente ningún partido se libra o se librará de tropelías neofascistas, ya estén situados en la derecha, en la izquierda o en el centro.
Si el domingo no vamos a votar otros lo harán por nosotros.
Acordarse de lo que pasó en Andalucia hace unos meses
Por decir algo se te ha olvidado citar la bajada de la cuota de los autónomos.
Sr Mata:
Con todo mi respeto hacia su persona y mi incondicional afecto como amigo de la infancia, debo rebatirle toda su argumentación. Vive usted en un grave error (como la mayoría de los que militan en partidos de la izquierda).
Su diatriba no está suficientemente argumentada de la imparcialidad que merece el análisis y más bien parece estar dirigida hacia ese sector de indecisos que hasta ahora han votado al PSOE.
Ni la historia de los últimos 80 años, ni los acontecimientos más recientes le avalan.
Tiene razón, sin embargo, en decir que los tiempos han cambiado y que tanto la política como la vida social y económica han progresado adecuadamente, por mucho que “ustedes” se empeñen a retroceder a los tiempos del fracasado intento republicano, que por cierto, para la inmensa mayoría de los españoles, ya había sido superado.
No se da usted cuenta –o si lo sabe, lo elude por espurios intereses- de que, de un tiempo a esta parte (o mejor dicho, desde que en la izquierda se instalaron unos dirigentes neófitos), la izquierda más radical ha intentado reanimar las cenizas y escarbar en las heridas ya casi cauterizadas de nuestra última lucha fratricida –llámese guerra civil, alzamiento nacional o cruzada- con animosidad alevosa y sentimientos de venganza para volver a dividir a una sociedad que durante los últimos 40 años ya había superado –o intentado superar- los motivos que impedían la concordia nacional.
“Ustedes” desde que llegaron a ocupar la poltrona, empezaron a remover lo que casi todos sabíamos, pero casi nadie quería volver a recordar; entre otras cosas, porque todos teníamos por qué callar.
“Ustedes” inventaron la “memoria histórica”, que si bien tenía algún fundamento si hubiera servido para corregir injusticias cometidas por ambos bandos, cuya única obsesión era reverdecer los “casos” cometidos por los fascistas e ignorar las ignominias causadas por los “rojos”.
“Ustedes” se han obsesionado, con mentalidad enfermiza y ansias de revancha, por desenterrar al anterior Jefe del Estado –si, al dictador-, con una total falta de consideración y de respeto; comenzaron a cambiar los rótulos de las calles –de las que llevaban el nombre de algún fascista, pero ninguna de las que están rotuladas con personajes de la izquierda-; han eliminado estatuas de insignes personajes de la historia –menos de los vuestros-.
“Ustedes”-en definitiva- lo único que han hecho ha sido dividir, enfrentar, dislocar, acentuar la división ideológica. ¿Con qué finalidad?
Y esto no lo digo yo, sino que lo he oído referir a grandes dirigentes y políticos de talla ideológica y pensamiento progresistas cercanos a su partido.
En las últimas campañas electorales ha aflorado esa división que se está cociendo; esa dispersión del voto que a ninguno de los dos partidos mayoritarios le favorece y “ustedes” lo han propiciado.
Han conseguido –no sé si adrede- que el multipartidismo que ha funcionado bien en las cuatro últimas décadas, con dos partidos mayoritarios y otras fuerzas reagrupadas que servían de “bisagra” haya revertido en dos bandos irreconciliables. Y si usted tiene memoria histórica sabrá que ya ustedes practicaron esta estrategia en 1936 cuando crearon el “Frente Popular” y obligaron –como hoy- a la reagrupación de la derecha en la Confederación Española de Derechas Autónomas (CEDA).
Quieren y desean volver a las andadas.
En España hay militantes de izquierda, de derechas y de otras fuerzas intermedias; pero la inmensa mayoría es apolítica, no lo olvide D. Manuel.
“Ustedes” han forzado el alineamiento de fuerzas contendientes en ambos bandos. Dios quiera que no se repita la historia.
Salu2
Los ricos o ricos pobres nunca estarán de acuerdo con la izquierda,todo lo contrario de algunos pobres, cosa que no entiendo.🤔
Luego no nos quejemos de que nos explotan en el trabajo,que no tenemos ley de dependencia que no tenemos becas y que tenemos que pagar los libros de nuestros niños. Si hay que elegir extremo prefiero la izquierda.😉
Saludos y crucemos los dedos☘☘☘☘☘
La paja en ojo ajeno.....
Constructivamente te comento:
Te conozco personalmente Manolo y tengo que decirte que esperaba algo un poco más positivo. Engrandecer la oposición como un monstruo que viene a comernos para meter miedo y votar con miedo no me pareció la manera más inteligente de pedir el voto.
Y de Podemos no dice nada Sr Mata??
Un trabajador que vote al mismo partido de derechas que su jefe, deberka mirarselo en un especialista.
Sr. Manuel, Los peligrosos no son los leones o tigres, por que nos pondríamos a la defensiva y los venceríamos, los peligrosos son los mosquitos que nos pican de noche y nos transmiten la muerte. En política ocurre lo mismo, lo que matan son aquellos partidos que se denominan de izquierdas pero realizan reformas y leyes de derechas.
Mejor que no diga nada del Podemos dejarlo como esta que sera la muleta de Sanchez
Un torero sin muleta no es nada. La muleta es la herramienta imprescindible para que un torero toree al toro. Para PODEMOS es mejor ser muleta que ser toro.
Nota: Toro.- Animal que enviste a diestro y siniestro, algo parecido a VOX
Manuel han hecho algunas cosas gracias al que le empuja a ello y como sabes este es UNIDAS PODEMOS.
Lo del toro y el pez en la pecera me suena de algo.
Vamos haber. De 10 cosas que escriba Enrique Alonso 8 son contra el psoe. Este hombre si que vive feliz en su pecera. No ve lo que hay que Pablo Iglesia se ha puesto a disposicion de Pedro Sanchez para ayudarle a que gobierne. O ke.
Mientras el aqui dando caña al psoe como si fuera el enemigo.
le hace sin querer supongo el juego a la derecha que dice mata.
Hay un proverbio árabe que dice: El amigo de mi enemigo es un vendido.
Para ir de juerga cualquiera puede ser mi amigo, pero si tuviera que ir a una guerra, me gustaría tener amigos, amigos de verdad porque en sus manos pongo mi vida.
A Pablo Iglesias irá a la guerra contra los poderes ocultos de la derecha con un amigo y a la primera de cambio, ese amigo de va a clavar un puñal por la espalda. Muy pronto veremos como su amigo socialista negocia con el enemigo de la derecha (Cs, entonces diremos que su amigo es un vendido, pero ya será muy tarde para Pablo y para los que creyeron que el PSOE era un amigo de fiar.
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