"¿Ladrillo? no gracias, ¿especulación? no gracias, ¿impacto medioambiental? no gracias. GESTIÓN PÚBLICA SI", por Gabriel Meléndez

Gabriel Meléndez Muñoz es coordinador y portavoz del SAT Jimena.

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En la noche del miércoles y casi tras cuatro horas de debate intenso, la Junta Rectora del Parque Natural de los Alcornocales aprueba con el resultado de 21 votos a favor, una abstención y doce en contra, la propuesta hecha por Verdemar Ecologistas en Acción de instar a la Junta para que se declare como monte de dominio público la finca La Almoraima.

Decir que me siento decepcionado sería una mentira, ya que se preveía, por como se coacciona desde Madrid a dirigentes locales de nuestra comarca para el fomento del feudalismo, la perdida de patrimonios públicos y hacernos creer que el ladrillo es la solución. Personalmente considero como una contradicción y de las gordas, que la derecha se proclame tan defensora de la patria cuando quiere dejar una riqueza de un valor incalculable, ya sea en manos del colega francés y su querida Salma Hayek o de cualquier inversor, multimillonario...


Ahora es la Junta de Andalucía que a base de las peticiones realizadas por todos los colectivos sociales, Verdemar Ecologistas en Acción, sindicatos, la que tiene que agilizar el procedimiento o pasos para ampliar el parque natural, declarar como monte de dominio público y principalmente, ayudar por todos los medios a que se de una gestión pública-municipal.

No se pueden tirar los cohetes al cielo, pues mañana cuando amanezca, los problemas seguirán ahí, y no solo es el que se venda o no, si no el desempleo, el que cientos de familias de Jimena, Castellar, como de toda la comarca en sí, tenga que ir a Caritas, porqué la asfixia económica está llamando puerta por puerta, con pueblos que tienen que hacer frente a los abusos en las facturaciones de las aguas y basuras, viendo como se colapsan las salas de urgencias mientras un hospital muerto de la risa y sin terminar desde hace casi dos años, como pueblos que suman 10.000 habitantes solo disponen de una ambulancia (a 40 kms los hospitales), por los cortes de agua o luz que se andan haciendo, desahucios y por tener una frontera más propia de hace dos o tres siglos atrás, donde el debate del sin sentido nacionalista de la derecha española por Gibraltar, que solo sirve para lo que sirve, para desviar la atención y perjudicar a dos pueblos hermanados como son Gibraltar y La Linea, los comercios, turistas, trabajadores/as que cruzan de un lado al otro...

Sin acritud, le recuerdo a nuestro alcalde como al resto de la corporación local, que hay muchos registros de entrada sin contestar, mociones aprobadas sin su publicación correspondiente en el BOP y sin ejecutar, como 3.700 hectareas de monte público (aprox. 3000 de alcornocal, que hay que rozar, la saca de corcha, el corcho y su transformación...) esperando a ver si algún día, nuestros gobernantes se ponen de acuerdo para que todo ese beneficio que procede de esos montes públicos, se quede para los bolsillos de los jimenatos/as y las arcas municipales con una gestión pública al cien por cien.

También entiendo esa falta de credibilidad por parte de la ciudadanía a la gestión pública, pero ¿por qué una gran mayoría (por no decir todas) de las administraciones públicas o empresas públicas no son rentables como tendrían que ser, o son un auténtico timo para los pueblos? Y para el ejemplo no hay que irse muy lejos, ahí tenemos a ARCGISA, una de las tantas empresas públicas mancomunadas a las que tenemos que pagar no solo el sueldo de los trabajadores como el concejal correspondiente a estos servicios (que es como debería ser), si no que además hay que hacerlo con siete u ocho consejeros que cobran de los 50.000 euros anuales en adelante, como mantener una mancomunidad con siete vicepresidentes, un secretario por cada partido con representación...

Resumiendo, han disfrazado una empresa privada en pública. ¿Cual es el resultado?, que al final es como el sector privado, hay varios accionistas que en este caso serían políticos de vuelta (como se suele decir) los que se benefician de ello y nosotros, paga que te paga esas burradas. ¿Y es esto lo que queremos?. Y es triste decir esto, pero es la realidad ya que poco sirve el quejarnos y quejarnos sin actuar contra ello, pues luego a la puerta del ayuntamiento o a la plaza cuando hay una protesta no va casi nadie, y será por que motivos no hay... como para salir a la calle o tirar pa Madrid el 22 de Marzo a decir que ya está bien de tanta timocracia...