lunes, 30 de diciembre de 2019

"Las travesuras de Cupido... Ella esperaba cada día a su hombre", por Eduardo Navarro "Er Pedagogo Jimenato"

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Las travesuras de Cupido... Ella esperaba cada día a su hombre

Antes de las luces del alba su hombre, como cada mañana, salía a faenar. Ella le aguardaba en su hogar.

Y con ofrendas a la Diosa Ceres, de guirnaldas de flores y hogazas de pan recién hecho, con su cuerpo oraba a la fertilidad.
Los rayos del sol entraban por la ventana y se reflejaban en su cuerpo desnudo. Irradiaba tanto deseo carnal.
En sus aposentos  franqueaban los gemidos, cuando de sus labios escapaban suspiros y se entreoían las caricias en la flor de Venus.
Adoraba esas antiguas costumbres, como una verdadera mujer que deja jugar a sus sentidos sin cadenas.
Y al anochecer cuando su hombre regresaba, tras la cena, buscaba sus manos con ternura, le besaba los labios y custodiaba sus sueños más sensuales, cuando dormía profundamente por el agotamiento.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Más verde que travieso, no?

Anónimo dijo...

No se por que le han dado ese premio a Buceite demasiadas cosas que ofenden a Dios y a doctrina cristiana.
Hijo mío no hay otra Cosa para escribir.
Carmen

Anónimo dijo...

¡¡CARMEN, AYYYY, CARMEN!! 28 de diciembre fun, fun, fun...!!
Y no hay por que espantarse de lo más natural, pues se ofende a la Naturaleza o a Dios o a los dos, por habernos regalado ese don tan extásico y maravilloso, ¡si en esta vida no hay nada mejor! Si es la mejor invención de los dioses, de las musas, del amor...
¡Con tantísimas cosas que tenemos y que tiene la vida para quejarnos y te quejas de lo más maravilloso que se pueda inventar...!: el más efectivo de los relajantes, la cúspide de los remedios naturales más eficaces y sexual que posee la Naturaleza, lo divino que demota amistad, cariño y amor. Hasta la mejor broma llena de simpatía te ha superado Carmen, no la disfrutaste como hay que disfrutar las bromas y el sexo.
Saludos Carmen, si es que existes..., pues puede ser otra broma, ¿también de mal gusto...?

Anónimo dijo...

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No sé de qué te escandaliza.

Si para la conservación del individuo,
Dios puso a su alcance los alimentos:
Dulces, salados, picantes
y también para, disfrute y deleite.
Para la conservación de la especie,
puso a su alcance el sexo
también, con deleite y goce.
Si el comer y el sexo fuesen
como el segar en verano,
cebada en terreno pedregoso
clarilla y cuesta abajo,
el mundo estaría yermo
sin vida y en silencio.

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