La Santa Misa presidida por el Sr. Obispo de Cádiz-Ceuta Monseñor Rafael Zornoza Boy el domingo, puso el broche final a los exitosos actos de celebración del 50 Aniversario de la Iglesia de San Pablo Apóstol en San Pablo de Buceite.
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***Álbum con 140 fotografías.
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Pasadas las siete de la tarde Cristóbal Moreno "El Pipeta" hizo un interesante recorrido histórico por las iglesias que ha tenido nuestro pueblo, deteniéndose más especialmente en la primera de la que se tiene noticia que se remonta al siglo XIX, y que se encontraba en la calle Real hasta la Guerra Civil, donde aún se conserva el arco del campanario, y donde se veneraba a Santa Leocadia.
A continuación Charo Blanquer, viuda de José Ramos Zambrana "El Pintor", nos habló de sus 20 años vividos en nuestro pueblo, y su colaboración con los diferentes párrocos y actividades cristianas, cuando incluso cuando llegaron a pedir al obispo de la época que nombrara un párroco que residiera en nuestro pueblo.
Con la iglesia llena, la misa en la que participó el Coro de San Pablo, el Señor Obispo Rafael Zornoza estuvo acompañado por el párroco Joe Idurayaras, el padre Octavio Vega, el padre Camilo, y el padre Juan Manuel Alonso.
Y tras la eucaristía llegó el momento de los agradecimientos y placas de recuerdo al señor obispo, a todos los párrocos visitantes, al párroco de San Pablo Joe Idurayaras, y a la presidenta de la Asociación de San Pedro, San Pablo y la Virgen del Carmen, Amalia Anaya, por el gran trabajo realizado.
Ya en la calle Real el obispo compartió conversación con el alcalde de Jimena Guillermo Ruíz, con el concejal sampableño Cristóbal Lirio, y con muchos feligreses y vecinos que se acercaron a saludarle.Tras lo cual compartieron una suculenta cena en los salones parroquiales.
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2 comentarios:
¡Siempre desde mi punto de vista!
Estoy contento por como salieron todos los actos del 50 aniversario de nuestra iglesia; todo gracias al trabajo de una serie de personas de la Asociación de San Pedro y San Pablo y la Virgen del Carmen, así como a los colaboradores.
¡El pueblo ha respondido (no como se quisiera, pero ha respondido), los invitados a colaborar con sus actos también!
El día de la visita del obispo fue magistral, la iglesia estaba repleta y todos contentos; más aún nuestro párroco que, como siempre que es necesario, no quedó defraudado por el pueblo. Nuestro pueblo no defrauda; es como es, como cada uno somos, pero no defrauda, gracias a todos, gracias por quedar bien cuando ha sido realmente necesario.
Todos los homenajes con entrega de placa a los actuantes en cualquier acto me emocionaron por merecidas. Con respecto a mi, gracias por el detalle de esa placa tan bonita.
Pero, el que más me emocionó y he creído más merecido de todos ha sido el de Amalia y, además entregado por el propio obispo (esto no ocurre a menudo). Y, repito, no solo me emocionó por el acto en sí, me congratuló su merecimiento "es digna de eso y de mucho más, porque está inmiscuida en muchas más cosas sociales, especialmente con los niños, y sería de mal nacido el no reconocerlo". ¡Cuanto sacrificio Amalia!, pero no decaigas, que lo mas bonito de todo es ir por la calle y que los niños te hablen con ese cariño inocente que todos desprenden: "Dejar que los niños se acerquen a mi". Y si hoy es bonito más alentador será después, cuando, en el mañana, ya sin tanta fuerza, todos, de una forma u otra, te recuerden; cuando, casi o totalmente te hagas inmortal en tu tierra.
Quiero que sepas "que ese nudo dulce y retorcido en mi garganta -como si de merengue fuera-, que subió hasta mis lagrimales abriendo el postigo de ese agua salada, como un mar de alegrías que se desparrama gota a gota en la dicha de la felicidad" inundó los zurcos de mi mejilla, sin vergüenza, con gozo y satisfacción por ese reconocimiento tan digno y meritorio con el que alguien, de sorpresa para todos, te alzó al altar de la mención honorífica de las personas con alma noble y buen corazón.
Me congratulo.
Gracias Amalia, por ser como eres.
Gracias Cristóbal, por estas palabras tan emocionantes, se me han desparramado gotas de felicidad surcando mis mejillas, como tu bien dices. Tengo que decir que yo sola no hubiera hecho nada. Pero gracias a Dios, tengo a mi alrededor gente muy comprometida, muy trabajadora y muy implicada para que esta nueva Asociación salga para adelante. Mi agradecimiento a todas las personas que de una manera u otra han puesto su grano de arena, para que este evento fuese a buen puerto. Y gracias a ti por tu colaboración y por tu consejo.
Amalia.
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