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EL CASO DEL EMPRESARIO DESAPARECIDO (II)
En los últimos años el número de personas desaparecidas en España ha aumentado de forma alarmante. En 2019, año en que transcurren los hechos que aquí se cuentan, la cifra ascendió a 2.163, aunque hay que señalar que casi el 80% fueron jóvenes procedentes de países del Magreb que abandonaron los centros de acogida camino, en su mayoría, de Francia donde tenían familia.
Nada que ver con el caso de Aitor Garratemendiaga. Así que, abriendo el abanico de posibilidades, el inspector Romerales y la oficial Zambrano se desplazaron hasta la Costa del Sol en busca de posibles conexiones con la mafia rusa -clientes preferentes de sus partidas de jamón ibérico- especializada en blanqueo de capitales y mercados clandestinos de petróleo procedente de países de la antigua Unión Soviética como Tayikistán o Armenia.
Con la autorización judicial correspondiente investigaron cuentas opacas, despachos dedicados a fondos de inversión, empresas subsidiarias, sociedades instrumentales, acudieron con identidad falsa a eventos en clubs reservados de alto standing, y solicitaron ayuda a sus compañeros de Marbella sin encontrar conexión alguna.
Una multa de tráfico, a nombre de Garratemendiaga tres meses antes de la desaparición en el kilómetro 18 de la A-405, llevó a los agentes hasta San Pablo de Buceite, una pedanía en el límite entre las provincias de Cádiz y Málaga, donde, según averiguaron, Aitor se había reunido, en un restaurante llamado “La Estación”, con propietarios agrícolas de la zona, ya que en los planes de diversificación industrial parece ser que valoró la posibilidad de entrar en el negocio de las frutas ecológicas.
Tras interrogar a varios vecinos, entre ellos el cartero y el responsable de un blog local, Romerales y Zambrano concluyeron que no hubo acuerdo en el precio, el trato no se firmó, y aunque Aitor prometió volver para degustar las exquisitas berenjenas rellenas, allí nunca más se supo del empresario vasco.
“La mejor arma de un policía no es la Heckler & Koch semiautomática, sino su propia intuición” le dijo su padre el día que Dorotea ingresó en la academia de Ávila. Y, efectivamente, ese destello, esa ráfaga de lucidez que a veces irrumpe en nuestro subconsciente y que aflora a los terrenos del raciocinio dándonos una visión periscópica de la realidad, acudió aquel viernes en su ayuda.
La música de Mendelssohn había acabado, nadie se encargó, porque nadie había, de colocar otro CD, el silencio se podía cortar en toda la cuarta planta del edificio… Era el momento, match point, jaque mate, y Dorotea, consciente de ello, descolgó el teléfono para, lentamente, marcar los nueve dígitos: 9 5 6 3 2 0 0 0 0
Ring…. Ring…..
(CONTINUARÁ)
10 comentarios:
Me tienes intrigada Manolo... Ya en la tercera parte terminará no??
Pues como te tardes mucho con los "CONTINUARÁ", el empresario va a aparecer antes de que nos enteremos de tú final...!
Qué te gusta utilizar la intriga, Manolo!
Deseando la tercera, amigo!! Enhorabuena!
Los vascos son los que más saben de comer bien así que habrá que hacerle caso y probar esas berenjena rellena
Cuidadin con la investigación de cuentas opacas, vayamos a liarla que no está la Cosa para bromas. Vayamos a poner en peligro un pilar fundamental de la democracia.
Genial Sr. Mata. Domina usted todos los palos. Que no tarde mucho esa tercera parte, aunque yo creo que la asesina, como siempre, será el ama de llaves.
He mirado en la guia de telefonos y el 95632 es de Jerez de la frontera. ¿Estará en la casa de Bertin Osborne de fiesta?
Mi intuición policial, un pálpito, un farol, o los tres juntos. Me hacen pensar que nuestro protagonista, harto de este mundo de hipocresía y puñaladas traseras, puso tierra por medio y desapareció de forma voluntaria
Ex comisario Pacurro
Te has ganado, Mata, una cena para dos en el Restaurante "La Estación", creo que Nieve, (aunque no le hace falta por sus merecidos y extraordinarios platos) no pondrá pega en invitarte por la propaganda.
Me estoy empezando a preocupar
En la calle se habla más de que la pasado al Vasco que de las cosas que hace el ayuntamiento
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