"Con toda nuestra admiración", por Cristóbal Moreno "El Pipeta"

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CON TODA NUESTRA ADMIRACIÓN

“El maestro cada día

se nos brinda por entero,

y con trabajo y desvelo

nos da su sabiduría”

(Jorge Horacio Richino)

    Al poeta y escritor D. JOSÉ ÁNGEL GRAU FERNÁNDEZ, profesor de 5º de Primaria en los colegios de San Pablo de Buceite.

    Y yo, en mi modestia de aprendiz, aprendí otra vez, para llenar un siempre aprendiendo. Llegué a entusiasmarme extremadamente con una frágil sensibilidad pero sintiendo mi romántico egoísmo de doble reconocimiento: “Mi profesor es un poeta como tú abuelo y me ha dicho que quiere conocerte” -me dijo orgulloso el cariño de mi nieto Iker.

Una mañana, a la misma hora de todas las excursiones escolares -en la que me tocó (obligatoriamente) llevar hasta el autobús a mi nieto-, le conocí entre otros profesores, como a un profesor cualquiera, intuí en él el Don de todos los profesores y algo más.

Y no me equivocaba, cada uno tiene sus gustos, sus aficiones; entre él y yo, letras, prosa y versos –posiblemente haya más-, todo es cuestión de conocerse mejor.     Dos pasos hacia mi ha dado él, yo aún ninguno: dos saludos simplemente y me parece muy poco. Ni siquiera le había leído, ¡pero ahora si disfrutaré esa poesía regalada de uno de sus libros: “Risas y Rimas”, y ya son tres sus pasos…!, y yo…, ninguno.

Ayer fue para mi un gran día.  Estuve, como en otras ocasiones, para aprender de los chiquillos. Llegué tarde a la “Elección de las delegaciones infantil y juvenil para la feria del pueblo”; pero no para ver y oír a “los colegiales de 5º,  dirigidos por el susodicho profesor José Ángel, que  hicieron un teatrillo en la Casas de la Cultura”.

¿¡Un teatrillo!? ¡¡Qué dices, Cristóbal!! , ha sido una obra cultural rozando la perfección para unos neófitos del arte, pues en pocos días de ensayos se habían convertido en artistas; y no me vengan con lo de: ¡claro, amor de abuelo! ¡¡Nooo…, de abuelos, de padres, de parientes y de vecinos…, y de otros muchos –que sin ser familiares-, por curiosidad, se pasaron por allí!!.

Dentro, silencio y bocas abiertas por la grata sorpresa de lo que estaba aconteciendo; a la salida, comidillas pero de elogios.

Muchos eventos de niños se han visto en este pueblo y en otros coincidiendo con el fin de curso y por diversos motivos. Disfrutamos con ellos, con unos más y con otros menos.  Apreciamos el trabajo de profesores, padres y aficionados a la escritura; todos, sin excepción son loables. Encomiables trabajos se han escrito y meritorias las escenas realizadas por los niños previa dirección  de sus profesores (maestros, catequistas, etc.).  Para los niños todas las obras teatrales son buenas, para los asistentes los gustos pueden ser variados; la realización con esos inexpertos artistas pueden ser desde buenas hasta pasar por mediocres pero el sentido común nunca las tipificará como malas, aunque ésta, ésta vez…, ha sido muy diferente: todo ha sido bueno, excelente la consideró el clamor.

Todos quedamos impresionados. Hasta los más normales defectillos estuvieron maestramente camuflados o convertidos en simpáticas anécdotas que no se habían salido del guión: naturalidad espontánea. Se notó sublime dirección en los ensayos. Sintonía. Conocimiento. Maestría.  Y lo más importante: contenido netamente pedagógico. Letra amena y comprensible para su edad, simpática, artísticamente profesional y muy equilibrada y juvenil; simetría perfecta con ciertos problemas actuales, la adolescencia es una etapa muy importante a tener en cuenta: existen grandes riesgos pero también grandes oportunidades.

   

De forma muy sencilla, abreviada pero completa; teatral e ingeniosa, pone a los niños como actores y éstos explican a su público los problemas y sus soluciones óptimas (ejemplo: los riesgos de Internet y demás tecnología se combaten con deporte y cultura:  lectura, escritura, poesía…).  Incide en el cuidado de la naturalaza y el medio ambiente y en muchos otros temas de interés, y alerta de los muchos peligros que les acechan en la calle, como son las drogas y tantos otros. Finaliza extractadamente pero con detalles, en los graves  problemas que les pueden ocasionar las tecnologías, para que entiendan  y den a entender que:

   

    • La tecnología (ha creado una nueva y diferente forma de establecer relación con los amigos), que si bien necesaria, está generando en los niños  una subordinación al mundo digital e incide negativamente en el rendimiento escolar.

    • Adicción preocupante a Internet y a los dispositivos digitales

    • Uso compulsivo de los teléfonos móviles y sus aplicaciones (apps, tablets, juegos, etc.).

    • El sedentarismo del ordenador

    • La preocupación general que está generando en los adultos el abusivo uso de dichas tecnologías.

   

Muy bonito el final con los niños preguntando a los asistentes sobre los problemas actuales que más les preocupan y los que más saludables ven. La despedida apoteósica. Todos nos dimos cuentas de que aparte de tener como profesor a un escritor y poeta, tenían a un inexpugnable maestro, no solo de literatura sino de la propia vida y sus problemas.

   

En lo que a mi respecta me sentí orgulloso y a la vez anonadado de su cultura, de su profesionalidad y de su humildad. Independientemente de tener a otro maestro más al que poder acudir como maestro y como amigo.

Muchas gracias José Ángel, aquí tienes a un pueblo que empieza a reconocer tu profesionalidad y tu valía; igualmente apreciamos la tan difícil y sufrida profesión de la que todos hacéis gala, aunque no quede más remedio reconocer que en todas hay sus excepciones.  Nuevamente enhorabuena.
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