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| Cristóbal Moreno El Pipeta presentando su relato |
En la clausura del Club de Letra correspondiente al año 2014-2015, que se celebró el pasado viernes en la Casa de la Cultura de la Estación de Jimena, en la que nos representó nuestro escritor y poeta Cristóbal Moreno "El Pipeta", lo hizo con el relato corto que se acompaña, titulado "TE ARRANCARÉ DE TU SUEÑO", que fue positivamente muy comentado por los asistentes al mismo.
La biblioteca de dicha Casa de la Cultura fue obsequiada con varios libros de algunos escritores de las diversas ciudades gaditanas presentes en el acto -una treintena venidos desde Cádiz, San Fernando, Jerez, Chiclana, Puerto de Santa María y Algeciras, todos pertenecientes al Club de Letras de la U.C.A., dirigido por el profesor y catedrático D. JOSÉ ANTONIO HERNANDEZ GUERRERO.
La afluencia de público fue escasa para la calidad del acto literario que contó con la inestimable colaboración de D. JOSÉ REGUEIRA, farmacéutico, historiador y escritor, como orador en representación de nuestro término municipal.
TE ARRANCARÉ DE TU CUERPO
Por Cristóbal Moreno Romero
Viernes por la noche; mañana no tenía que madrugar para ir al trabajo. Era su fin de semana. Dos días de reposo viendo la tele y durmiendo a pierna suelta sin nada que le molestara. Solo se levantaría de la cama para ir al baño y comer.
Casi todas las mañana despertaba con dolor de cabeza, era culpa de su hipertensión. Había comenzado la película y no pensaba perdérsela; la estaba viendo recostado en el sofá después de la buena cena. Interesante película de acción y suspense; le quedaba un descanso al menos, después de cuatro anteriores durante los que había dado alguna cabezadilla, despertándose a sobresaltos y “taquicárdico” al creer que se había perdido el final. Somnoliento y enganchado se mantenía expectante con los párpados semicerrados. Fue terminar y automáticamente se durmió.
Una sombra más negra que la noche se le echó encima ahogándole con su peso. Sudaba y se asfixiaba, la sentía en sus entrañas; luchó como un jabato y con un gruñido que más pareció un ronquido logró rechazarla. Su corazón parecía un caballo desbocado y su pecho un compresor a todo gas. La sombra se evaporaba en la oscuridad revoleteando del revés. Sus ojos de fuego se clavaron en los suyos; sus labios ondulados en rictus de muerte se abrieron para dar vista a una garganta sin fondo desde donde una voz tormentosa resonó con eco: “¡¡Ya volverás a confiarte y entonces te arrancaré de tu cuerpo para siempre!!”.
Con una bocanada de aire emergió de las profundidades de aquel agujero negro alejándose de esa luz que le atraía como un imán y…, despertó apnéico.
Aterrado juró no dormirse más sin su CPAP (máquina para contrarrestar la apnea del sueño, o bien, máquina de presión positiva continua en la vía aérea).
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1 comentario:
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El que entre apneas dormita
no descansa, no reposa
porque en realidad, no duerme.
Es una lucha constante
entre la vida y la muerte,
entre el respirar y la asfixia
y entre, el me quedo o me voy.
Se viven mil pesadillas
y muchas veces terrores,
es quizás el subconsciente
que lucha por no sucumbir
tocando los resortes que puede,
para que por fin despiertes
y des, aire a los pulmones,
oxígeno al cuerpo y a la mente.
Bendita máquina la CPAP
que, con su tubo y máscara nasal,
cual cordón umbilical,
merma la movilidad, pero
unido a la vida nos tiene.
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19.04.16
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Antonio. –El niño del Corchado-
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