lunes, 31 de agosto de 2015

La agricultura tropical de Málaga pide agua del Guadiaro para crecer y ofrece 80 millones de euros para la conducción

Leído en Málaga Hoy. Por su interés reproducimos esta noticia.
El sector, con facturación global de 200 millones y 20.000 empleos, dispuesto a aportar 80 millones para una conducción de agua excedente que permitiría doblar la superficie cultivable
ENCARNA MALDONADO
La falta de agua le ha puesto techo al pujante sector de los subtropicales de Málaga. La cosecha de aguacates está estancada en torno a las 40.000 toneladas anuales que producen 6.000 hectáreas, mientras que el mango, menos exigente con los riegos, ha pasado de poco más de 1.500 hectáreas a 4.500 en apenas unos años, que permitirán pasar de las 20.000 toneladas actuales a 60.000 en una década. Sin embargo, el sector ya no podrá crecer más.


 "Tenemos tierra, tenemos clima, tenemos un producto muy valorado en el mercado europeo y tenemos el conocimiento, pero el suministro de agua está muy mal organizado", resume Enrique Colilles, gerente de la cooperativa Trops, líder en la comercialización de frutas tropicales.

"El problema no es solo que no se pueda crecer más, es que está en peligro lo que tenemos sino llueve", agrega Benjamín Faulí, de la organización agraria Asaja. Los cultivos de subtropicales de la Axarquía tienen asignadas cuotas de agua del pantano de La Viñuela siempre vinculadas a la disponibilidad. Por ejemplo, este año cuenta para los meses comprendidos entre junio y septiembre con 11,06 hectómetros cúbicos que permiten irrigar las fincas situadas por debajo de los 140 metros de altitud, por encima de esta cota necesita recurrir a aguas subterráneas ahora fuertemente afectadas por las altas temperaturas y la falta de lluvias.

El sector no solo urge una solución, sino que también tiene sobre la mesa una propuesta: trasvasar 50 hectómetros cúbicos anuales desde el río Guadiaro a la Viñuela para garantizar las explotaciones existentes y duplicar la superficie cultivable llevando agua a la franja de terrenos baldíos que se extiende desde Vélez hasta Rincón de la Victoria, al norte de la autovía. "El río Guadiaro lanza al mar de 600 a 700 hectómetros cúbicos de agua cada año. Nosotros necesitamos menos del 10% de ese caudal que se tira". Subraya que no se trata de entrar en disputa por el agua, sólo aprovechar excedentes.

La industria de los subtropicales calcula que una conducción desde el río Guadiaro necesita una inversión de unos 80 millones, "que en 10 años estaría amortizada", recalca el gerente de Trops. Esta alternativa se ha planteado a las administraciones sin éxito. "La respuesta es que los subtropicales consumen mucha agua y es cierto, pero también son muy rentables, generan mucho empleo y mucha riqueza". "Es más, si la Administración no quiere o no puede realizar esta inversión , el sector podría asumirla siempre y cuando nos allanen el camino y no pongan pegas", afirma Enrique Colilles. "Es una inversión rentable. Es una cuestión de números y de que la Administración no ponga pegas".

Benjamín Faulí reconoce que el sector "demanda una solución" de ahí que a la vista de los rendimientos y de las expectativas de retorno de la inversión "podría decidir que vale la pena" asumir los costes. No obstante, él prefiere un remedio definitivo para el déficit hídrico estructural del conjunto de la provincia. Desde su punto de vista, la solución definitiva es la interconexión de las cuencas para llevar agua excedente donde haga falta.

Los subtropicales son, junto a los cultivos bajo plástico del Poniente almeriense, una excepción en la agricultura andaluza desde el momento en que ha sabido posicionarse en el mercado internacional y asegurarse el valor añadido de la comercialización y la industria auxiliar. La facturación global se aproxima a los 200 millones y genera en torno a 20.000 empleos que incluyen tanto la recolección y el cultivo, como la actividad empresarial vinculada a la comercialización y transformación, la gestión del riego o el transporte. Solo la cooperativa Contravelma dispone de una flota de 100 camiones dedicados casi en exclusiva a trasladar las cosechas de aguacate y mango de la Axarquía hasta sus destinos europeos, y Trops tiene una plantilla de 140 personas, "muchos biólogos, químicos, ingenieros y economistas", matiza Colilles. Doblar la superficie de subtropicales significaría elevar en 140 millones la facturación en Málaga y 10.000 empleos adicionales.

Los aguacates y mangos de la provincia de Málaga alcanzan en el mercado europeo precios hasta un 50% más elevados de los que se pagan a sus competidores más inmediatos. Brasil, primer productor mundial, e Israel son los principales rivales del mango local pero en ambos casos la calidad del producto que llega a Europa se ve perjudicada por la recolección sin alcanzar el punto de maduración ideal y el transporte refrigerado. En la mitad sur de África también se cultiva mango pero su venta se ve perjudicada tanto por la inestabilidad política y administrativa de estos países, como por las deficiencias del transporte. Colilles compara los aguacates de la Axarquía con los bonos del Tesoro. "Son un valor seguro". El principal productor mundial es México donde el consumo per cápita ha caído en 15 años de 11 kilos por persona a siete "porque todo lo compra el mercado estadounidense". Es, además, un árbol muy vulnerable a la falta de agua y una fruta que aguanta mal el transporte, circunstancias que están limitando la expansión de estos cultivos en el mundo.

Este panorama ha provocado que "nuestro problema sea tener contentos a los clientes porque quieren comprar más del que tenemos". Las cosechas que se empezarán a recolectar a partir del mes de septiembre hace meses que están vendidas. "La presión es tal que algunos clientes quieren comprarnos la producción en pleno invierno, antes incluso de la floración y de que podamos hacer estimaciones de la cosecha", admite el gerente de la cooperativa.
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Imagen de http://www.fyh.es/

4 comentarios:

Anónimo dijo...

La gota que colmaría el vaso; nadie apuesta por la modernización de los regadíos del Guadiaro tras muchos años del primer trasvase cuando ya se especula de una segunda aberrante maniobra. Si es verdad que se pierden 700 hectómetros cúbicos al año directos al mar, primero que se guarden parte de ellos para nosotros, lo que necesitamos y más aún lo que estemos dispuesto crecer. A partir de ahí que otros paguen lo que les cueste si quieren ver aumentar sus riquezas. El río Guadiaro, para bien o para mal, inundaciones incluidas, será nuestro.

Martín Blanco

Anónimo dijo...

Todo sería posible si se hiciera bien y se reconvirtiera en beneficios positivos para las zonas de regadío afectadas por el Guadiaro. Ahora hemos visto como el trasvase al Majaceite ha sido un engaño sin control y, en cierto modo, un prejuicio más bien para la cuenca del Guadiaro.
Para que no ocurriera un descontrol en los trasvases y suministrar nada más en las crecidas de los causes normales, en cada boca de trasvase debería de haber un control exhaustivo del caudal existente y el que se trasvasa que no afectara para nada a los beneficios veneros del río en cualquier época del año, quedando con ello libre de peligro el favor de los cauces normales.
¿Y como controlar eso? Pues muy fácil mediante contadores especiales manejados y supervisados por las directivas y guarderías de las Juntas de Regantes afectadas.
Tal como se expone, sería cierto que todo el agua sobrante que se tira al mar en las grandes crecidas, o crecidas superiores que así fueran designadas por estas directivas,harían un gran favor a estos sectores. Solo que - y a la vista está - ni hay tal control ni se está beneficiando a la cuenca del Guadiaro y sus usuarios con nada. Todo ha sido un total engaño. No se puede caer nuevamente en tales errores.
De modo que así, el ejemplo nos demuestra, que no se debe acceder, salvo que se haya amarrado muy bien, bajo contratos, que si no se cumplen quedarían derogados, y el cauce volvería a su origen, aunque se desperdicie el agua (esto que parece violento sería la seguridad para ambas partes para cumplir con lo acordado).

Anónimo dijo...

Señor Martín blanco aprenda de los agricultores de Málaga y déjese de tanta naranja y más fruta tropical que genera más mano de obra y sus frutos tienen más salida em el mercado y a mejor precio

Anónimo dijo...

los agricultores de aqui la gran mayoria no entiende de eso se creen muy listos todos y mas vale aprendiera de la gente malaga