jueves, 13 de marzo de 2025

"Obituario de Teresa Gil Corbacho", por José Antonio Hernández Guerrero

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Obituario

Fallece Teresa Gil Corbacho

Cristina Pérez acaba de comunicarme la dolorosa noticia del fallecimiento de Teresa Gil Corbacho, esa mujer buena que, dotada de un irreprimible vitalismo, ha luchado contra su enfermedad y contra todas las dificultades que le salían al paso. Recordamos su forma sencilla de disfrutar soñando con el tiempo que, en compañía de su esposo, hijo, madre y hermanos, le restaba para surcar la larga travesía juntos recorrerían. Todos los que la han tratado de cerca coinciden en que era un ser paciente, amable, tierno y, en ocasiones, dulce, que sembraba amor, que cultivaba la amistad y que medía sus gestos con primor.

Era una mujer buena, sencilla, cariñosa y alegre, que buscaba la serenidad y que ostentaba una contagiosa simpatía y una exuberante capacidad para comunicarse y para expresar sus ganas de vivir. Si tuviéramos que definir con una sola palabra a Teresa, posiblemente la más adecuada sería la “bondad”. Era una señora esperanzada cuyo rostro irradiaba unas incontenibles ganas de vivir y un inagotable deseo de servir. Éste es, a mi juicio, el término que mejor le cuadraba y el que más han pronunciado y escuchado sus familiares, amigos y amigas, sobre todo, durante su enfermedad.

Les confieso que, aunque, por sus amigas, conocía sus dolencias, no podía –o no quería- aceptar que Teresa nos fuera a dejar. Me atrevo a afirmar todavía más: a medida en que advertía que se deterioraba su salud, aumentaba nuestro convencimiento de que esta mujer que, durante su juventud y su madurez, había sido un modelo de alegría y de vitalidad, superaría esos inoportunos trastornos. Todos me han contado con detalle sus esfuerzos para soportar los sufrimientos y el delicado cuidado que ponía en evitar o en suavizar el dolor de los que la rodeaban. 

Con su esposo Jorge Medina, con su hijo Álvaro, y con su madre Juani Corbacho, sus hermanos Francisco, Rosa y María Gil, somos muchos los familiares, amigos y paisanos que expresamos nuestra admiración y nuestro dolor. Que descanse en paz.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias Jose Antonio por poner las palabras que muchos de nosotros sentimos. Cristina Rubio