jueves, 16 de abril de 2015

“¿Estoy naciendo?”, por Cristóbal Moreno El Pipeta

Cristóbal Moreno Romero El Pipeta ha publicado este relato en la sección de narrativa del núm. 20 de la revista del Club de Letras de la Universidad de Cádiz SPECULUM, que se publica en la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes, dirigida por José Antonio Hernández Guerrero.
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¿ESTOY NACIENDO?
Maldita oscuridad… ¿Qué hago yo en este lugar? ¿Floto o nado? ¿Duermo, sueño…?
¿Cómo he sido capaz de llegar a este sitio tan apacible? Cuando llegué solo vi una intensa luz en mi cerebro y de pronto oscuridad. ¿Qué me pasa en los ojos?, ¡no puedo abrirlos! ¿Cómo vi entonces esa luz…? ¡Otra vez me vuelvo a dormir! Misterio… ¿Saldré alguna vez de aquí? ¿Me sacarán…?.

Ahora no soy capaz de recordar nada. ¿Quién soy? ¿De dónde vengo? ¿Por qué motivo estoy sujeto a mi cintura? ¿Por qué me han metido en este fluido que me rodea, que se mete en mi nariz, en mi boca…? ¡Ah!, ya sé el motivo de no poder ver, tenía los ojos cerrados para evitar el líquido espeso, calentito… ¡No me desagrada, oye! Pero éste no es mi mundo, me han de sacar de aquí. No entiendo de dónde vengo, si me quedo, o a donde voy. No sé nada. ¿Aaah…, estoy en el seno de mi madre?

¡Vaya!, algo me empuja, el líquido hace presión sobre mí. Veo una luz allá a lo lejos. Algo se lía en mi cuello, ¿es el cordón umbilical?, ¡no puedo respirar, me ahogo…! El líquido sale a borbotones yo con él. ¡Bien! ¡Estoy mareado!; ¡por fin otra vez la luz! Unas manos me quitan la manguera que rodeaba mi cuerpo. Me ponen de costado; me besan en los labios, me soplan, toso, devuelvo ¡Uuuf...¡ Ya puedo respirar; por fin veo el cielo y caras.

Veo la excavadora alejarse, el líquido apestoso y negro, y el gran agujero por donde ha vaciado el pozo ciego. Ya oigo… a personas hablando… ¡Un segundo más y el niño no lo cuenta…!

1 comentario:

Anónimo dijo...

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Al comenzar la lectura
Pensé que había encontrado
A la persona más precoz
En cuestiones de recuerdos
De cuantos había encontrado
Cuando he finalizado
He tenido… como decepción
Pero alegría también
Ya que su imaginativo bebé
Del pozo ciego lo han rescatado
Que, aunque mugriento y mal oliente
La vida le han salvado
Un buen e intrigante relato.
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08.04.16
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Antonio. -El Niño del Corchado-