La Junta destina 448 personas y 18,6 millones al plan del Infoca en la provincia de Cádiz

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Un centenar de profesionales pone a punto el dispositivo con un simulacro en el entorno del castillo de Castellar
A. R.
El dispositivo para la prevención y extinción de incendios forestales (Plan Infoca) de la Junta de Andalucía mantendrá este verano la dotación económica y de personal de la pasada campaña para la provincia de Cádiz. 448 personas y 18,6 millones de euros son las dos grandes cifras del operativo junto con tres helicópteros, 12 vehículos autobomba (y otros 106 para el transporte de personal), 14 puntos de vigilancia y una red móvil así como tres centros de defensa forestal (Los Barrios, Alcalá y Algodonales).

El delegado del Gobierno de la Junta en Cádiz, Fernando López Gil, y el responsable territorial de Medio Ambiente, Federico Fernández, presentaron ayer la dotación diseñada para Cádiz en el transcurso de un simulacro de incendio en el entorno del castillo de Castellar de la Frontera.

Y lo hicieron en Castellar dado que la comarca campogibraltareña fue la zona más atacada por las llamas durante el pasado verano, con el 64% de los grandes incendios (45 de los 70 fuegos) y el 90% de la superficie quemada sobre el total de la provincia, con 224 de las 250 hectáreas.

Un centenar de profesionales recreó una situación de emergencia forestal en el enclave -dentro del parque natural de Los Alcornocales- bajo un supuesto incendio de nivel 0 con evolución a nivel 1 para poner a punto la coordinación entre las distintas fuerzas que intervienen en catástrofes de este tipo: Infoca, 112, GREA, Bomberos, Guardia Civil, Policía Local y Autonómica así como el 061. Castellar es una de las doce zonas de Cádiz consideradas como compleja por el Infoca ya que para proteger a la población habría que optar por su confinamiento en lugar de la evacuación (lo más frecuente) dado que sólo existe una carretera de acceso. Así, los profesionales recrearon el despliegue de un frente de acción en tierra y otro aéreo mediante helicópteros, la instalación de un hospital de campaña y un puesto de mando avanzado.

López Gil y Fernández insistieron en la necesidad de acabar con la sensación de impunidad y recordaron que desde el pasado año un grupo operativo de la Policía Autonómica forma parte de la Brigada de Investigación de Incendios Forestales (BIIF). Tres de cada cuatro siniestros registrados en 2012 en el Campo de Gibraltar fueron intencionados, por lo que apelaron a la prevención social.

Así mismo, Fernández demandó una vez más a los ayuntamientos un papel más activo en la prevención, como corresponsables de garantizar la seguridad de las personas. El delegado territorial insistió que apenas un tercio de las zonas obligadas a tener planes de autoprotección -urbanizaciones, diseminados, gasolineras o naves levantadas en entornos forestales- tienen este documento actualizado. El resto, o carece de él o lo tiene desfasado. Son 154 zonas en la comarca, de las que 42 están al día mientras que en toda la provincia suman 317 enclaves. "Y su exigencia es tarea de la administración local, para evitar el riesgo para las personas", recordó. Los planes dotan a las urbanizaciones con elementos como cortafuegos perimetrales o carriles de acceso que facilitan las labores y mejoran la seguridad de los residentes.

La Junta, así mismo, está elaborando un mapa provincial de riesgo en urbanizaciones, de las que la mayoría están en la comarca.

Pero la labor del Infoca no se ciñe exclusivamente a la campaña de verano. Durante el invierno se ha revisado la red de cortafuegos, compuesta por 250 kilómetros de pistas en el Campo de Gibraltar (800 kilómetros en el conjunto de Cádiz) que suponen una valiosa vía de acceso a los terrenos y para frenar el avance de las llamas. Su puesta a punto copa (junto con otras labores preventivas) el 60% del presupuesto anual del Plan Infoca (11 de los 18,6 millones) con el fin de proteger 350.000 hectáreas repartidas en seis espacios naturales en la provincia.