A nuestros amigos de San Pablo de Buceite.
Todavía mantenemos fresco el recuerdo de todo el cariño y la solidaridad que nos entregaron durante nuestra visita a su encantador pueblo el verano pasado. Una y otra vez disfrutamos de las fotos que nos tomamos en sus casas, en los lugares de acogida, en sus calles, en sus monumentos históricos, pero sobre todo, junto a las personas de San Pablo, que entre otras muchas cosas nos enseñaron, lo ilimitado del corazón del hombre cuando se dispone a fomentar la Paz, el Amor y la Alegría, superando supuestas barreras geográficas, étnicas o raciales.
Por eso hemos recibido con mucha emoción el excelente regalo navideño que nos han hecho llegar a nuestra escuela. Este equipo de música no solo está contribuyendo a la calidad de la docencia, sino que también es un pequeño pero valiosísimo monumento, siempre a nuestro lado, a la amistad que logra vencer, con desvelo y sacrificio, el tiempo y la distancia.
No les podemos decir que nuestro afecto a ustedes ha aumentado porque ya era muy grande al abandonar San Pablo de Buceite, de regreso a Cuba, saben que entre lágrimas y abrazos. Más que un gesto solidario han actualizado su presencia entre nosotros. Pero lo que sí aumentó es el número de cubanas y cubanos agradecidos y beneficiados de ese empeño por hacer el bien, tan andaluz y español, que los cubanos bien conocemos. Al llegar el equipo a la escuela, era un pedacito del pueblo y el rostro de cada uno de ustedes lo que arribaba, en especial la cercanía de esas otras personas del pueblo que tal vez no pudimos conocer pero sí percibimos a través de su preocupación hacia nosotros.
Los alumnos de nuestra escuela (quienes fueron a España y los que no), los profesores, el resto de los trabajadores y la dirección de este centro de la enseñanza artística cubana, estamos muy agradecidos a todos los que hicieron posible este regalo.
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Jefa de la Cátedra de Actuación.
Escuela Nacional de Artes Escénicas.