Villa Smith sede de la Man. Municipios del Campo de Gibraltar |
Leído en el diario Europa Sur. Por su interés reproducimos esta noticia.
El presidente de la Mancomunidad propone a los alcaldes condonar la deuda estatutaria, 8 millones, a cambio de que sean regulares en el pago y salden en diez años los impagos por servicios prestados
A. R.
La Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar afronta una semana clave para definir su modelo de futuro. El presidente de la entidad supramunicipal, Diego González de la Torre, se muestra dispuesto a combatir el déficit estructural de una institución que gasta cada año casi 2 millones más de lo que ingresa. Una tendencia que, de no corregirse de forma urgente, pone al barco donde los siete municipios embarcaron -allá por 1985- al borde de la zozobra.
A. R.
La Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar afronta una semana clave para definir su modelo de futuro. El presidente de la entidad supramunicipal, Diego González de la Torre, se muestra dispuesto a combatir el déficit estructural de una institución que gasta cada año casi 2 millones más de lo que ingresa. Una tendencia que, de no corregirse de forma urgente, pone al barco donde los siete municipios embarcaron -allá por 1985- al borde de la zozobra.
Un agujero económico que De la Torre rechaza cuantificar en toda su extensión pero que se produce por la falta de pago de los ayuntamientos de la cuota estatutaria y servicios prestados desde la entidad (como la gestión de acciones turísticas o cursos); también hay cargas financieras por el concierto de créditos para paliar la falta de liquidez o la asunción de cargas como la exención de las tasas universitarias. La situación y la hoja de ruta, precisa De la Torre, abarca sólo a la Mancomunidad de Municipios como institución; Arcgisa, la empresa de servicios públicos (agua, basuras y limpieza) sigue un cauce diferenciado.
El pasado lunes 23, De la Torre trató de concienciar de las dimensiones del problema a los siete alcaldes y les conminó a buscar una solución de consenso que confía alcanzar el próximo lunes 7 de mayo. Según explica el presidente comarcal, la consecución del equilibrio financiero pivota sobre dos ejes principales: la asunción de un compromiso firme para el ingreso de las cuotas estatutarias de ahora en adelante y el pago de las deudas acumuladas por la prestación de servicios. De hecho, la confección y tramitación de las cuentas para 2012 están condicionadas a la adopción de un acuerdo que permita cuadrar las cifras.
El presupuesto de 2011, el último aprobado, reflejaba una previsión de ingresos de 6.336.739,39 euros, equilibrado a gastos (siempre sin contar con Arcgisa). Sin embargo, el análisis del apartado de ingresos revela que de esos 6,3 millones de euros la institución sólo es capaz de generar por sí misma menos de 5.000 euros. El resto depende de las denominadas transferencias de capital, entre ellas los pagos de los Ayuntamientos y el canon procedente de Arcgisa. Pero la realidad es que los municipios han venido históricamente recibiendo servicios de la entidad sin transferir su coste, según reconoce el propio presidente.
Las cuotas estatutarias son, salvando las distancias, similares a las que pagan los propietarios de los pisos de un bloque de viviendas. Su cálculo se basa en parámetros como el presupuesto municipal y la población, lo que permite dar a cada municipio un porcentaje de participación sobre el total (ver tabla adjunta). Para 2012, los ingresos previstos por este concepto ascienden a 582.462,77 euros. Sin embargo, De la Torre revela que estas cuotas nunca han sido pagadas pese a que los propios estatutos de la entidad fijan un mecanismo de cobro y recargos en caso de impago. Sólo la deuda por este concepto alcanza los ocho millones de euros, lo que revela que, efectivamente, los municipios han escurrido el bulto durante años.
La Universidad de Cádiz reclama otros 547.000 euros por la exención de tasas universitarias. Una deuda que ya no crece debido a la desvinculación de los estudios universitarios de la Mancomunidad. "Fue una idea de cara a la galería, irresponsable desde el punto de vista financiero y que ahora nos pasa factura", detalla el presidente. En cuanto a los servicios, el grado de pago de las cuantías pendientes por parte de los siete ayuntamientos es irregular. "Cada uno tiene pagadas unas cosas y debe otras. Hemos ajustado la cuenta de cada municipio y entregado para su cotejo de aquí al día 7", destaca De la Torre sin, de nuevo, querer entrar en cifras concretas. Y, los créditos bancarios suman otros 790.000 euros de coste al año. Suma y sigue.
¿Cómo tapar estos agujeros? La presidencia ha establecido dos iniciativas. Por un lado, la Mancomunidad está dispuesta a condonar la deuda estatutaria (los 8 millones de euros) a cambio de que los municipios se comprometan a pagar regularmente sus aportaciones a partir de este año. Por otro, la entidad ha propuesto un plan de reintegro de la deuda por los servicios a diez años.
Pero con esto no se acabaría el embrollo contable. Tal y como reveló Europa Sur el pasado mes de marzo, la Mancomunidad también debe las cuotas a la Seguridad Social desde el año 2010. Un hecho que ya provoca consecuencias dañinas para el ente, que tiene bloqueada la percepción de incentivos y subvenciones necesarias para prestar servicios. Así, otra de las acciones previstas en la Operación Villa Smith pasa por solicitar un plan de pago aplazado con el que desbloquear la percepción de fondos del Estado y la Junta. "Si ponemos en marcha todas estas medidas lograríamos insuflar oxígeno, bajar los gastos del presupuesto, corregir el déficit y ser viables como institución", apostilla.
No se trata únicamente de reducir el déficit. El presidente insiste en que si se consigue enderezar el timón, la Mancomunidad será capaz de asumir nuevos servicios como la recogida de animales abandonados, una prestación que no es atendida en muchos municipios y que supone un problema de salud pública que requiere solución. "La Mancomunidad podría asumirlo y reducir los costes en lugar de tener siete. Es el espíritu, unir para ser más fuertes ya que la Mancomunidad es patrimonio de los siete municipios. A nosotros nos ha tocado gestionarla", concluye.
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