El alcalde de Jimena, Pascual Collado, ha anunciado la próxima publicación de un bando municipal en el que se informará a los vecinos acerca de sus derechos y obligaciones como usuarios de gas butano, con el fin de poder evitar posibles abusos en la prestación de los servicios de revisiones y reparaciones de la instalación doméstica.
En las últimas semanas, la Policía Local de Jimena ha detectado la actividad en el municipio de personal perteneciente de empresas instaladoras de gas butano, lo que ha motivado la inquietud de vecinos alertados ante lo que podría ser una estafa. Desde el cuerpo de seguridad local se ha informado que dicho personal pertenece a una empresa instaladora autorizada pero, en cualquier caso, se han realizado una serie de consejos para evitar posibles abusos.
-Imagen de www.pasaia.net -
Así, se recuerda que las revisiones de dichas instalaciones son obligatorias cada cinco años y que es el usuario el que ha de hacer frente al pago de la misma. La revisión la ha de realizar un instalador autorizado o agencias distribuidoras de la empresa suministradora.
Sin embargo, cuando el instalador acuda al domicilio del usuario, este no está obligado a aceptar su servicio, puesto que tiene derecho a elegir cualquier otra empresa autorizada. En este sentido, se recomienda que se solicite información sobre el precio que le van a cobrar por la realización del servicio para compararlo con el de otras empresas y optar por el que más convenga al usuario. Pueden darse grandes diferencias de precios de unas empresas a otras. Hay que desconfiar de las empresas que acudan a realizar una revisión o sustitución de piezas sin que el usuario lo haya solicitado.
También se recuerda que las gomas de las conducciones de gas sólo deben ser cambiadas si están defectuosas o caducadas. El regulador y las abrazaderas no tienen caducidad.
El usuario debería exigir una factura detallada del trabajo realizado y conservar las piezas sustituidas ya que en caso de reclamación podrían ser consideradas una prueba.
La empresa que revise la instalación deberá entregarle un certificado de revisión periódica a la finalización de los trabajos.
Sólo la empresa suministradora del butano puede negar el servicio, nunca los instaladores. Para que ello, además, debe ocurrir que el usuario no haya cumplido con su obligación de mantener la instalación en buen estado o no remite el certificado de revisión pasados cinco años desde la instalación.
¿Qué empresas se deben elegir para hacer esa revisión?
Se deben elegir las empresas:
- Que estén legalmente autorizadas por la Junta de Andalucía con un número de registro y cuente con instalador o instaladores autorizados.
- Que antes de realizar cualquier trabajo entreguen al usuario un presupuesto escrito, para que lo acepte o lo rechace, con indicación de los precios de los materiales que se van a emplear y de la mano de obra, así como los desplazamientos si los hubiera
- Que tengan a disposición de los usuarios las tarifas de las piezas, de la hora de trabajo y de otros servicios concretos que realicen.
- Que tengan a disposición de los clientes las hojas de reclamaciones oficiales.
- Es aconsejable que las empresas elegidas se encuentren adheridas al Sistema Arbitral de Consumo y en sus documentos o publicidad figure el distintivo correspondiente. Esta adhesión supone una garantía para el consumidor en caso de que tuviera que hacer una reclamación.
Consejos a tener en cuenta
- No dejar entrar en el domicilio particular a ninguna persona que ofrezca la revisión de la instalación de gas si no la hemos solicitado.
- Pedir siempre la acreditación de instalador y de empresa autorizada por la Junta de Andalucía.
Antes de realizar el trabajo es obligatorio recibir un presupuesto escrito y detallado de materiales y mano de obra, para aceptar o rechazar el servicio sin ninguna objeción, tomando el tiempo necesario para leer incluso la letra pequeña. El usuario tiene derecho y es conveniente que compare las tarifas de distintas empresas instaladoras puesto que son precios libres y pueden variar considerablemente de unas a otras.
- No se debe firmar ningún documento o factura si no se ha recibido y aceptado antes el presupuesto escrito.
- También las empresas multinacionales más conocidas envían cartas o envían a su personal a los domicilios de sus clientes para ofrecerles la revisión de las instalaciones de gas. Los clientes tampoco están obligados a aceptar este servicio ni a dejar pasar a dicho personal al domicilio. Si se aceptara la revisión que ofrecen, también es obligatorio acreditar su autorización, recibir un presupuesto escrito y aceptarlo antes de realizar la revisión.
- Cualquier empresa instaladora autorizada, al final de la revisión, debe entregar al usuario una certificación acreditativa de la revisión y del contrato de mantenimiento. Si se sustituyen piezas, el usuario tiene derecho a quedarse con las piezas viejas, que pueden servir de prueba en caso de reclamación.
- Si el dueño de la instalación no cumple con la obligación de mantener las instalaciones en buen estado o no remite el certificado de revisión transcurridos los cinco años, la empresa suministradora del gas butano puede negar el suministro.
- Las gomas del butano no hay que cambiarlas si no están defectuosas o caducadas. La fecha de caducidad viene indicada en las mismas gomas. Si hay que sustituirlas puede hacerlo uno mismo, si tiene la destreza necesaria. Las gomas nuevas y homologadas se pueden comprar en cualquier establecimiento o empresa distribuidora y también varían los precios de unas a otras.
- El regulador y las abrazaderas de las bombonas de gas butano no tienen caducidad determinada. Si fuera necesario el cambio por avería o deterioro, el instalador autorizado será el que lo indique, para que el dueño de las instalación acepte o no la sustitución.
- Siempre hay que pedir presupuesto previo escrito, leerlo y entenderlo en su totalidad y aceptarlo o rechazarlo antes de que toquen la instalación del gas.
- Por supuesto, hay que pedir siempre factura de la revisión, sin necesidad de firmarla. Es suficiente con pagarla.
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