"Sigo siendo un iluso", por Juan Muñoz

SIGO SIENDO UN ILUSO

Sólo me quedan fuerzas para criticar

Iluso de mi que no quería admitir lo grave que en realidad está mi pueblo.  Cuando se utiliza el insulto, venga de quien venga, y no hay quien reaccione en su defensa enseñando los dientes, es porque la gravedad es extrema.

Me permití el lujo de escribir un articulo provocador e insultante a San Pablo -VER aquí-,  con el único objetivo de crear polémica, que se me contradijera y que saliesen a la luz comentarios de los que tienen la información, aclarando los motivos que nos han llevado a la situación en la que nos encontramos, "mi gozo en un pozo”.  Otro desencanto acumulado a los tantos y tantos que me llevan irremisiblemente a tirar la toalla.

Quiero agradecer los comentarios aduladores aunque inmerecidos que he recibido, y por supuesto,  mi agradecimiento también a los que, escondidos en el anonimato, exponen su opinión.  Ahora bien, al margen de los problemas ya enumerados, cuya solución es competencia de la administración, me dirijo a todos/as ustedes:

Queridos sanpableños, la llave para que un pueblo funcione, la tienen sus habitantes reivindicando y exigiendo la solución de esos problemas que afectan, directa o indirectamente, a la convivencia.  Pero también es nuestra la competencia de darle vida con la participación y organización de actividades.  Nos quejamos de que no tenemos ambiente, pero estamos deseando muy legítimamente y con todo el derecho, coger carretera y manta para comprar, divertirnos y convivir  en los pueblos vecinos dejando al nuestro,  al que se nos llena la boca diciendo que es el mejor del mundo, solitario, desangelado y moribundo.  Estamos inmersos en la apatía, desidia y dejadez.

Así nos va, tenemos lo que nos merecemos.

Un abrazo para todos/as.

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